miércoles, 27 de febrero de 2013

Bésame si quieres, quiéreme si sabes.


No, no digas nada, yo hablaré. ¿Me has echado de menos? Porque yo a ti mucho. ¿Eres un verdadero tirano sabes? Me cuesta estar mosqueada contigo, pero esta te la guardo. No te hagas ilusiones. Me gustaría hablar pasando del juego... por una vez. ¿Te gusta mi vestido? No estaba segura. Se lo he birlado a mi hermana. Tenía este o otro rojo tipo bomba nuclear o algo así. Debí ponerme ese... lo sé. He debido pasarme más o menos tres horas frente al espejo. ¡Pero ha merecido la pena, estoy guapa! Y espero gustarte, si no te meto un tortazo. ¡Espera! Shhhh. Por donde iba... El problema es que si me dijeras "me encantas" no podría creérmelo. Julian, ya no sé cuando es un juego y cuando es verdad. Estoy perdida. ¡Espera,espera! No he terminado. Dime que me quieres. Dímelo porque yo jamás me atreveré a decírtelo primero. Me daría miedo que pensaras que es un juego.
Sálvame, te lo suplico.

domingo, 3 de febrero de 2013

Fácil acostumbrarse, difícil des-acostumbrarse.

'Escuché una vez a un viejo decir en un bar que el hombre, con el tiempo, se acostumbra a todo. Se acostumbra a vivir en Laponia a menos de cuarenta grados o en Barbate a más de cuarenta, se acostumbra a estar en una silla de ruedas, a perder un brazo, a no tener padre... Decía ese viejo que era la estúpida manera que tenemos de poder seguir siendo felices... Pero hay cosas a las que no te acostumbras ni con todo el tiempo del mundo, no te acostumbras a separarte del lado de esa gente que siempre ha estado ahí, no te acostumbras a los cambios, no te acostumbras al hueco del otro lado de la cama, nunca te acostumbrarás a no ver su sonrisa o a dejar de pedir dos copas en un bar o a comprar dos entradas en un concierto, a no notar su olor, ni sus besos, ni a que se te reviente el alma cada vez que te mires en el espejo y te des cuenta de que eres el gilipollas más grande del mundo por haber dejado escapar al amor de tu vida.'